PP EN UNIVERSIDADES.

 

El Secretario de Administración de la Universidad participó en un encuentro sobre los desafíos de la implementación de la herramienta del Presupuesto Participativo en la gestión de las universidades en un encuentro iberoamericano organizado por el especialista Nelson Dias en Portugal. Martín Mangas, promotor y analista de la iniciativa en la UNGS, comenta aquí las características y resultados de esa reunión.

 

Trayectorias comunes en materia de democracia participativa en diferentes municipios de España y Portugal, sumadas a la cercanía cultural y geográfica, han dado lugar a una voluntad de encuentro, diálogo y coordinación en relación al Presupuesto Participativo (PP). Eso se manifiesta de manera ininterrumpida desde 2012: en ambos países se comparte una agenda para intercambiar conocimientos, experiencias y buenas prácticas en el campo de la democracia y los presupuestos participativos en encuentros que se llevan a cabo en encuentros cada dos años (ya van cuatro), rotando la sede entre ciudades españolas y portuguesas.

El último “Encuentro Ibérico” se hizo en julio de 2018 en la ciudad española de La Coruña. En aquella ocasión, el municipio de Cascais, ubicado a 30 kilómetros de Lisboa, en Portugal, recibió la responsabilidad de realizar la quinta edición de ese proceso de cooperación, en octubre de 2020.La pandemia del COVID-19 obligó al municipio de Cascais a suspender la actividad y tras una evaluación de las condiciones de salud de los países, se decidió posponer esta reunión presencial para abril de 2022.

El propio municipio, la consultora “Oficina” que dirige Nelson Días, especialista internacional en PP (invitado por la UNGS a inaugurar la edición 2020 del PP UNGS) y el Observatorio Internacional de Democracia Participativa decidieron, para contribuir al fortalecimiento del diálogo en este período de suspensión de muchos procesos participativos y como forma de ir calentando motores para el evento de 2022, organizar una serie de conversatorios preparatorios en 2021.En esta circunstancia, tuvieron, además, la generosidad de convocar a municipios y universidades latinoamericanas para ampliar el espectro y pasar a una faceta “iberoamericana”.

Los dos primeros conversatorios, realizados en mayo de 2021, giraron en torno a la participación de niños y jóvenes en procesos participativos (ese tema es muy relevante en Portugal, que tiene una ley nacional de PP Joven en escuelas) y sobre la deliberación para rescatar el poder de la ciudadanía. El tercer conversatorio tuvo como eje a “los presupuestos participativos promovidos por Universidades”. En ese marco, la UNGS fue invitada a exponer su experiencia de nueve años de implementación del PP.

En el panel, además de Pablo Toledo, Secretario de Administración y responsable político del PP de la UNGS, participó Eugenia Suarez, ex Vicerrectora de Acción Transversal y Cooperación de la Universidad de Oviedo (España), y Soraia Gonçalves, responsable del Presupuesto Participativo del Instituto Politécnico do Cávado e do Ave (Portugal). Además, realizaron comentarios e intervenciones los académicos Antonio Fragoso, de la Universidad del Algarve (Portugal), y Francisco Francés de la Universidad de Alicante (España),.

La intervención de Eugenia Suarez, de la Universidad de Oviedo, puso en valor la decisión de la institución de aplicar el PP desde hace cuatro años en todas sus facultades, donde estudian unas 25 mil personas, enfocando todo el proceso en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas. En la universidad española, las fases del PP que aplican son similares a las que conocemos en la UNGS (información, difusión, presentación de propuestas, evaluación técnica y votación). En las cuatro ediciones ha votado aproximadamente en cada año el 5% de la comunidad universitaria y asumieron el compromiso de aumentar todos los años el monto a destinar al PP, alcanzar el 10% de participación en la votación, incrementar los proyectos sociales e incorporar indicadores específicos para medir el impacto del PP.

A su turno, Soraia Gonçalves, del Instituto Politécnico do Cávado e do Ave, comento la dificultad que para ellos era aplicar el PP en las cinco sedes de la institución (funcionan en las ciudades de Barcelos, Braga, Guimaraes, Vila Nova de Famalicao y Esposende, todas ubicadas al norte de Portugal). Allí asocian el PP al tema de las finanzas públicas y encaran un modelo pedagógico donde colocan en el centro aquellos asuntos referidos a las competencias básicas de la participación. Solo participan del PP los estudiantes.

En esa experiencia, las fases del proceso implican la presentación pública, la recepción de propuestas, la evaluación técnica (compuesta por una comisión donde está el administrador del Instituto y un equipo de docentes), la votación (con el criterio de un hombre, un voto) y la ejecución que se realiza en los 12 meses posteriores a la elección. En la institución portuguesa, los proyectos ganadores en la última edición fueron tres de temáticas diferentes: medioambiente, deportes y cultura. En la que se refiere al nivel de participación, votaron 769 estudiantes de un total de aproximadamente 4100 habilitados para hacerlo (18%).

Pablo Toledo, por su parte, comentó que “el PP surge en la UNGS en el contexto de un debate interno sobre la necesaria democratización de los órganos de gobierno; fue por eso que se decide someter a la discusión una parte de las prioridades de inversión: para generar un proceso participativo en la asignación de los recursos públicos”. Toledo explicó que “si bien la reforma universitaria de 1918 introdujo el derecho de los universitarios a gobernarse, fue recién casi un siglo después, en 2015, que la legislación nacional argentina rescató aquella definición de la Conferencia Regional de Educación Superior de 2008 que definió a la educación superior como un bien público y social, un derecho humano universal y un deber indelegable de los Estados y la introdujo en la ley que regula el funcionamiento de las instituciones universitarias argentinas”.

La idea del PP de la UNGS, dijo Toledo, “era pensar cómo la universidad podía ser gobernada más democráticamente, y eso solo era posible con más participación”. En relación con las principales premisas del PP UNGS, Toledo explicó que son cuatro: “es vinculante; hay participación igualitaria de los claustros (estudiantes, graduados, docentes y técnicos administrativos), con voto ponderado del 25% cada uno; toda persona que estudie o trabaja en la UNGS pueda participar y votar, y los proyectos deben contemplar un monto mínimo del 10% y un máximo del 30% del presupuesto que se pone a la discusión bajo esta modalidad. Como ningún claustro tiene un peso superior a otro, para ganar y acceder al financiamiento los proyectos deben responder a intereses transversales”.

Entre los aspectos más destacados de su exposición, Toledo comentó: “durante los nueve años que lleva el PP en la UNGS, en la institución se inició un proceso de reforma estatutaria que culminó, entre otras cosas, con la elección directa del Rector, Vicerrector y Decanos de los Institutos”. En ese contexto, “el PP formó parte de un impulso democratizador en la UNGS que permitió visibilizar los problemas, expandir esa mirada y habilitar espacios alternativos de militancia para instalar diferentes temas en la agenda del gobierno universitario”.

Para terminar, Toledo dejó una definición política, casi de principios, en torno al PP: “reivindicamos la potencia transformadora de la participación popular en la gestión y gobierno de la cosa pública”. Por último, hizo una reflexión en torno a la virtualidad: en la pandemia –dijo– “el PP de la UNGS pasó a modo virtual. Así lo hicimos en 2020 y así lo estamos encarando en 2021. Pero nos preguntamos todo el tiempo si son posibles las instancias deliberativas de ese modo, y entendemos que no: son un paliativo en esta circunstancia tan difícil, pero apenas se pueda volveremos a la presencialidad”. En los comentarios finales, tanto los catedráticos Antonio Fragoso y Francisco Francés como el profesor Domingo Rodrigues, de la Universidad de Madeira, Portugal, destacaron la visión expresada por el representante de la UNGS de que el PP es un instrumento eminentemente político cuyo fin es la democratización.

En fin, el encuentro fue una experiencia interesante no solo para visibilizar a nivel internacional la experiencia de la UNGS, sino también para tomar contacto con otras iniciativas similares en otras partes del mundo y seguir tejiendo lazos con instituciones y organizaciones de la sociedad civil que promueven esta herramienta. Vale la pena destacar, por ejemplo, que en Portugal las tres universidades más importantes (Lisboa, Oporto y Coimbra) aplican el PP. En España, aparte de en la Universidad de Oviedo, el PP esta presente en las Universidades de Cantabria, Politécnica de Cartagena, Málaga y Huelva, entre otras.

Al final, Nelson Días, coordinador de la reunión, destacó: “hay una institución, que es la Universidad, que tiene una cantidad de estudiantes, profesores y empleados que en muchos casos es similar a la población de una ciudad intermedia, y en general en esas instituciones, en la mayoría de ellas, no se debate cómo se puede promover la participación y mejorar la democracia. En ese sentido, este intercambio tiene que servir para seguir pensando e impulsando eso”.

Martín Mangas

 

07/07/21