COLOQUIO INTERNACIONAL.
La UNGS, la Fundación para la Libertad y el Conocimiento (FOKAL) de Haití, las Universidades Paris-Saint Denis y Paris-Diderot de Francia y los colectivos artísticos Kom.Post y Le Laboratoire Tournant organizaron un encuentro en el que se dieron cita académicos, artistas y referentes políticos y sociales. El tema excluyente fue el de los modos de hacer, de escribir y de narrar la memoria, un asunto que interesa centralmente a los equipos de la UNGS y que organiza muchas de sus actividades formativas, investigativas y de intervención (ver, en este mismo número, las notas contenidas en las páginas 5 y 6).
En la apertura de las actividades, la rectora de la UNGS Gabriela Diker dio la bienvenida a los participantes y destacó la relevancia y pertinencia del encuentro: “Desde su origen, la Universidad promovió la defensa de los derechos humanos y la reconstrucción colectiva de la memoria del terrorismo de Estado, que se expresó con crudeza en este territorio”. La rectora remarcó la fuerte labor de la Universidad en relación con esta temática, haciendo referencia al Programa “Memoria y Territorio” y a la Diplomatura en Derechos Humanos y Estrategias de Intervención en el Territorio, así como también a la participación de la UNGS en la Comisión por la Recuperación de la Memoria de Campo de Mayo.
A propósito del sentido con el que se impulsaron las actividades, el secretario general de la Universidad Gustavo Ruggiero afirmó que estas iniciativas “nos ayudan no solo a comprender cómo se construye la memoria sino también a reflexionar sobre los procesos que conciernen a otras geografías, como los de Haití y Francia. También demuestra un crecimiento de nuestra institución en la medida en que fortalecemos las estrategias de intervención territorial y los modos de acción pedagógicos, políticos y culturales para narrar nuestro pasado”.
Ruggiero manifestó también que “la intención de abordar la memoria desde una lógica plural parte de la comprensión de este campo de problemas como un campo teórico y práctico lleno de tensiones y de disputas por el sentido, donde no hay una memoria revelada”. Las universidades –dijo– “tienen una manera particular de producir memorias. El rigor metodológico y conceptual las conducen a entender las cosas, a veces, de manera diferente a como lo hace un artista o un militante. Por eso nos pareció importante provocar el encuentro entre distintos saberes”. Por su parte, la ex primera ministra de Haití y actual titular de la FOKAL Michele Duvivier Pierre Louis destacó que la memoria es una cuestión central para formular preguntas y alcanzar respuestas que sirvan para la democratización de países que atravesaron procesos como los que vivieron los nuestros: “cuando uno vuelve sobre el pasado”, dijo, “puede mirar el presente y el futuro”.
Durante la segunda jornada, los invitados visitaron distintos puntos del conurbano. Uno fue el Hospital Militar de Campo de Mayo, donde funcionó durante la última dictadura una maternidad clandestina. Otro fue el Barrio Manuelita, en San Miguel, donde un conjunto de vecinos realiza un trabajo sobre la desaparición de un grupo de sacerdotes durante la última dictadura. El recorrido también incluyó la localidad de Fátima, en Pilar, para conocer la actividad de la escuela secundaria N° 9 y tomar contacto con sus estudiantes, que desarrollan desde hace varios años un trabajo sobre la construcción de la memoria a propósito del trágico episodio conocido como la “Masacre de Fátima”.
En el tercer día de los “Encuentros de Memorias”, el entonces titular de la Procuración contra la Violencia Institucional de la Nación Abel Córdoba, el investigador docente del Instituto del Desarrollo Humano (IDH) Daniel Lvovich, impulsor de la Maestría en Historia Contemporánea, y Florence Elie, protectora del ciudadano en Haití, participaron en una mesa sobre “Prácticas de la memoria: lo judicial, lo académico y lo político”. Allí, la funcionaria haitiana destacó que la falta de independencia entre las esferas judicial, estatal y legislativa perjudica la investigación de crímenes de lesa humanidad. “Ustedes, para nosotros, son una gran escuela en proyectos de memoria”, aseguró Elie.
Después de repasar los casos de España y Argentina, Lvovich sostuvo que “vivimos en la era de la memoria. La memoria es una fuente, un testimonio, un objeto de estudio, y es significativo ver cómo los movimientos de derechos humanos participan de la vida académica”. Por su parte, en su intervención Córdoba puntualizó que “el sistema judicial es un ámbito donde existe un gran caudal de información sobre la dictadura”, y señaló que los tres poderes en la Argentina hacen de la memoria, la verdad y la justicia una política de Estado esencial para la sociedad. Aun así –subrayó– “queda un largo camino por recorrer. Porque mientras identificamos a los autores de la violencia en la dictadura, todavía nos falta encontrar a los responsables por la muerte de reclusos en las cárceles nacionales e incluso en los hospitales neuropsiquiátricos hoy”.
Luego, en la mesa sobre “Memorias y Territorios” expusieron Tatiana Guevara, del Programa “Memoria y Territorio” de la UNGS, y representantes de la Comisión por la Memoria del Barrio Manuelita, la Comisión por la Recuperación de la Memoria de Campo de Mayo y la Secretaría de Derechos Humanos de SUTEBA. Por último, se desarrolló una mesa redonda sobre “Políticas de ejercicio del poder, políticas de derechos humanos, políticas de memorias. Conflictos, sustituciones e incompatibilidades”, con la participación del exrector de la UNGS y actual investigador docente del IDH Eduardo Rinesi, de la ya mencionada Michéle Duvivier Pierre Louis, de Carlos Pérez López (Universidad de Chile), de Antonia García Castro (Universidad Católica de Chile) y de Ana Paula Penchaszadeh (FLACSO).
A partir de la cuarta jornada, el encuentro se desarrolló en la Ciudad de Buenos Aires, con recorridos por el Espacio Memoria y Derechos Humanos de la ex Esma, una reunión con los miembros del Equipo Argentino de Antropología Forense, una visita al Monumento a las Víctimas del Terrorismo de Estado y una charla en el Instituto de Altos Estudios Sociales de la Universidad Nacional de San Martín. El Encuentro Internacional de las Memorias finalizó con una actividad en el Espacio Ecléctico en San Telmo, donde el colectivo artístico Kom.Post realizó intervenciones creativas en vivo. “Con esta actividad, la Universidad confirma una línea histórica de trabajo, fortalece su compromiso con la memoria, la verdad y la justicia, y asume en su plenitud el impacto territorial que generan este tipo de acciones”, concluyó Ruggiero.
Yanina Fuggetta
Textuales
“Nuestra sociedad debió esperar 25 años para que comenzaran los juicios. Sin embargo, los avances jurídicos registrados en la Argentina fueron muy relevantes para nuestra historia. La justicia actuó a favor de la verdad y la memoria: reconoció los derechos humanos de las víctimas del proceso y les revocó el estigma de ser tratados como subversivos, por el solo hecho de pertenecer a organizaciones sociales y políticas.”
“Después de la última dictadura cívico militar, el sistema judicial argentino llevó adelante un trabajo constante para juzgar y enjuiciar a los represores. En democracia, más de 500 personas fueron condenadas a prisión, entre eclesiásticos, funcionarios públicos y policías. Todavía quedan 900 procesados por la justicia y 17 juicios orales en curso.”
“Argentina representa un paradigma de DD. HH, replicado por Italia, Francia y Estados Unidos. Es gratificante saber que otros países consideran nuestras políticas como emblemáticas y modelos a seguir para sus procedimientos judiciales.”
Stéphane Douailler (Paris 8)
“Más allá del Poder Judicial, en la Argentina fueron las organizaciones sociales y políticas y las universidades las que desarrollaron una fuerte investigación por la memoria. En el caso de Haití, mis iniciativas académicas se proponen visibilizar, compartir y exhibir los trabajos en las casas de estudio y construir colectivos de académicos que aborden problemas tan difíciles y dolorosos.”
“El trabajo de la memoria siempre está en sintonía con la verdad, la justicia y la construcción de la inocencia. Es necesario reemplazar a los que aparecen como víctimas, porque, si no, entran en una dialéctica del estilo ‘estas víctimas, ¿no serán culpables de algo?’. Entonces, el sistema jurídico entra en un doble juego entre la noción de víctima y la de su potencial culpabilidad.”
“Este encuentro de memorias es enriquecedor por el diálogo que entabla, los vínculos y las reflexiones que en él se generan.”
“El tema de la memoria es fundamental desde el momento en que creamos la Fundación, en pleno proceso de transición democrática. ¿Cómo podemos tener una mirada sobre el pasado, la dictadura cívico-militar, la represión, la arbitrariedad y la resistencia? ¿Cómo se construye el futuro, un elemento primordial en la construcción de la democracia? ¿Cómo podemos avanzar si no tomamos en cuenta la perspectiva sobre nuestro pasado? Y sobre todo, ¿cómo se plantea la memoria en su disparidad y complejidad?”
“La memoria es diversa y selectiva. Es un fenómeno complejo: no todos recordamos los acontecimientos del pasado de la misma manera. Y hay que poder negociar con esa diversidad para llegar a una conclusión que nos permita encarar el futuro.”
“Tenemos la capacidad de recordar de un modo selectivo, sabiendo claramente que hay memorias disímiles. Entonces, debemos lograr que nuestros recuerdos nos liberen y no nos aprisionen.”