EXPERIENCIA DE VINCULACIÓN.

 

La UNGS se ha propuesto desde hace ya varios años fortalecer la vinculación con el tejido de Pequeñas y Medias Empresas de la región, con miras a lograr dinámicas virtuosas entre el mundo del conocimiento y el mundo empresario. Esta tarea no es para nada sencilla y se enfrenta con múltiples desafíos. En ese marco, la Secretaría de Desarrollo Tecnológico y Social de la Universidad financió, a través del Fondo Estímulo 2018-2019, el proyecto de asociación UNGS ICO-IDEI con la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (ADIMRA) para realizar un diagnóstico sobre la situación de las empresas metalúrgicas y a fortalecer una red de servicios en la región provistos por diferentes actores: los municipios, las universidades y las cámaras empresarias, articulando esfuerzos e iniciativas para mejorar las condiciones del entorno productivo del sector. Integraron el equipo de la UNGS los investigadores docentes Germán Pinazo, del Instituto de Industria, Rodrigo Carmona, del Instituto del Conurbano, y la autora de esta nota, Bárbara Couto, también del ICO.

 

La articulación entre la Universidad y las cámaras empresarias es estratégica y enriquecedora para ambas partes. ADIRMRA tiene una amplia experiencia de articulación con universidades públicas. De hecho, la Universidad Nacional Arturo Jauretche, la UNSAM y la UTN Facultad Regional Pachecho vienen implementando proyectos muy ambiciosos de oferta de servicios tecnológicos paa las Pymes del sector, y la UNGS no había recorrido todavía ese camino, en el que estaba todo para hacerse. En ese marco, investigadores docentes de dos institutos de la Universidad nos reunimos con el Departamento de Estudios Económicos y la Dirección de Centros Tecnológicos de ADMIRA con vistas a definir posibles líneas de acción conjunta. La cámara tiene una oferta de servicios amplia y gratuita para las empresas asociadas y la UNGS es fuente de formación y conocimiento. Además, la Universidad, debido a su localización, tiene vínculos estrechos con los municipios de la zona, San Miguel, José C. Paz y Malvinas Argentinas, los cuales a su vez tienen mejor llegada y diálogo con las empresas y cámaras locales de la región.

De este modo, el acercamiento asociativo permite promocionar en las empresas las carreras técnicas, la formación de recursos humanos y los servicios de intermediación laboral de la UNGS, al mismo tiempo acercar servicios y capacitaciones de ADIMRA en materia de tecnología, comercio exterior, tratamiento de residuos, ahorro energético a las empresas del sector, y finalmente, los municipios también ganan, en la medida que pueden planificar capacitaciones y políticas de mejoras sectoriales con mejores herramientas cuando lo realizan de manera asociativa. Para las empresas de la región aledaña a la UNGS, la modalidad asociativa es una novedad, como también lo es la existencia de nuestra universidad. En otros distritos, como San Martín o Matanza, la presencia de redes e instancias de articulación público-privadas es más significativa. Por eso hay mucho trabajo que hacer en este campo. El Censo Industrial que realizó recientemente Malvinas Argentinas en articulación con la UNGS, arrojó que la mitad de las empresas encuestadas no conoce la Universidad. En ocasiones las empresas también desconocen que aportan una contribución a ADIMRA y que como tales, tienen beneficios que la cámara ofrece y que están desaprovechando.

En este marco, encaramos una encuesta a 25 empresas de la zona para conocer algunas características estructurales pero también para ver el impacto del modelo económico de ajuste, apertura y recesión de los años recientes sobre la situación reciente de las empresas. En la región hay alrededor de 120 empresas metalúrgicas, de las cuales más de la mitad se localiza en Malvinas Argentinas, un tercio en San Miguel y un 13% en José C. Paz. Los principales rubros son la elaboración de productos de metal y de bienes de capital, seguido por fundición, equipos y aparatos eléctricos y autopartes. La encuesta indaga sobre diferentes ejes: nivel de actividad, empleo, costos, financiamiento y comercio exterior. Encontramos, comparando con otros diagnósticos realizados por ADIMRA, que la dinámica reciente de las empresas de nuestra región es similar a la que atraviesan las empresas en la Provincia de Buenos Aires y en el total país. La mayoría de ellas contrajo su capacidad instalada, redujo personal, experimentando una fase de estancamiento o incluso achicamiento de su actividad. Por otro lado, el acceso al financiamiento fue absolutamente restrictivo con el nivel de tasas de interés vigentes, mientras que los programas de crédito con la banca pública a tasa subsidiada fueron restringiéndose cada vez más, llevando a contraer la inversión considerablemente. Solo la mitad de las empresas lograron invertir y decidieron hacerlo en bienes de capital esenciales para seguir produciendo. Asimismo, la apertura comercial llevó al 23% de las empresas a perder participación en el mercado, en especial en los rubros equipos y en componentes petroleros y autopartes.

El modelo económico actual sin lugar a dudas es anti-industrialista. Los tarifazos dañaron severamente la competitividad de las empresas que por otro lado fueron muy afectadas por la contracción del mercado interno. La falta de liquidez actual hace muy difícil el funcionamiento de las firmas. Hay que tener presente que estamos hablando de pymes, en muchos casos familiares, que hacen milagros para sostenerse, y que tienen una lógica muy endogámica y de poca articulación de tipo asociativa. Su red es la cadena de proveedores-clientes y no mucho más. El municipio es visto solo como agente recaudador, muchas no conocen o no se vinculan con cámaras empresarias y desconocen en su mayoría la existencia de la Universidad. Para dar un ejemplo sobre la importancia de articular instrumentos en red: hay una nueva ley ambiental de instalación de Industrias de la Provincia de Buenos Aires de 2019, muchas empresas desconocen o no poseen los recursos técnicos y de gestión para adecuarse a la nueva normativa. A partir de la articulación con ADIMRA y la Dirección de Ambiente de San Miguel se planificó una capacitación con OPDS (Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible) para trabajar sobre adecuación en materia ambiental y para brindar asistencia a los empresarios en la gestión electrónica de las solicitudes y presentaciones que requiere la nueva normativa.

Como reflexión final, los procesos de vinculación y transferencia de conocimientos entre las universidades y sus entornos productivos encierran un conjunto de desafíos complejos. Los mecanismos de intermediación o articulación entre el ámbito productivo y el ámbito académico llevan una trayectoria breve de desarrollo, siendo tradicionalmente dichos espacios relativamente endogámicos con lógicas diferenciadas de funcionamiento. La inestabilidad económica recurrente lleva a las pymes a atender las coyunturas de emergencia, dificultando su inserción en redes institucionales de apoyo sostenidas en el mediano y largo plazo. Asimismo, los circuitos internacionales de producción científico-académica ponen en tensión la función de investigación y la función de vinculación de las universidades con el entorno local o regional. En el caso de la UNGS, el entorno productivo presenta un carácter periférico, fragmentadoy heterogéneo, convocando mayor atención de los investigadores sobre las temáticas sociales y menor interés relativo sobre la cuestión de la innovación y el desarrollo tecnológico. En este sentido, la tarea de vinculación presenta un doble desafío, interpelar a los actores del entorno para construir una conciencia sobre la importancia de la asociatividad en el desarrollo regional, e interpelar a los actores de la UNGS a involucrarse en procesos de investigación-articulación-acción donde se pueda volcar la gran capacidad crítica que la Universidad posee para pensar los problemas productivos de la región.

Bárbara Couto