ESCUELA SECUNDARIA.

Es un hecho que las nuevas tecnologías cambiaron las prácticas de la vida diaria y se incorporaron en el ámbito de la enseñanza. Pasamos de la búsqueda en las enciclopedias de la biblioteca a la búsqueda por google, del uso de diccionarios de idiomas a traductores on line, y los grabadores fueron sustituidos por los programas de audio de los celulares.

Al principio el uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) en el aula fueron un poco resistidas por los docentes, pero con el correr de los años, y gracias al fortalecimiento de la formación docente en este campo, esa resistencia parece haber cedido. Así lo afirma el estudio Escenarios para la integración de TIC en la enseñanza: condiciones pedagógicas e institucionales, coordinado por Alicia Merodo, especialista en educación e investigadora docente del Instituto del Desarrollo Humano de la UNGS.

Esta investigación, financiada por el Ministerio de Educación de la Nación, constituye la tercera etapa de un estudio centrado en evaluar el impacto del Programa “Conectar Igualdad”,que, en sus cinco años de vida y según cifras oficiales, distribuyó 5.317.247 netbooks entre docentes y estudiantes de 11.585 establecimientos educativos de todo el país. Entre ellos, la escuela secundaria de la UNGS.

Según el estudio realizado por la UNGS y centrado en escuelas secundarias de la provincia de Buenos Aires, la llegada de las netbooks a las escuelas potenció los espacios de intercambio de material entre docentes y estudiantes con la creación de blogs y de grupos en redes sociales, el uso de carpetas compartidas a través de intranet o aplicaciones como Dropbox. “El aula aumentada desdibuja los márgenes del aula física y supone un intercambio permanente y en otros ámbitos, y también multiplica el tráfico y la producción de contenidos digitales al habilitar intercambios y publicaciones a gran escala”, dice el estudio, que subraya la importancia de la comunicación digital y sostiene que el uso de las computadoras portátiles sirvió para sentar las bases de una cultura escolar que aprecia esta forma de comunicación como un recurso ágil, rápido y necesario.

Las computadoras del “Conectar Igualdad” traen una serie de contenidos precargados ordenados según los destinatarios (docentes, alumnos, familia) y compuestos por diccionarios y programas y aplicaciones para física y química, para geometría dinámica y analítica, para graficar funciones matemáticas, para experimentar en el laboratorio y para diseñar mapas y gestionar proyectos, entre otros fines. “El uso de estos materiales, escasamente registrado en las etapas evaluativas anteriores, comienza a extenderse, probablemente de la mano de la difusión de las instancias de formación docente continua”, explican los especialistas, y agregan: “Comienza a vislumbrarse el inicio de una nueva etapa, más cercana al cambio cultural y pedagógico que significa una verdadera integración de las TIC en la enseñanza”.

Recientemente UNICEF Argentina publicó la Encuesta Nacional sobre Integración de TIC en la Educación Básica Argentina. El relevamiento se realizó en segundo semestre de 2013 en escuelas primarias y secundarias de gestión estatal y privada de la Ciudad de Buenos Aires y 23 provincias del país. Según la encuesta, “las computadoras, los televisores y los reproductores de DVD conforman una suerte de kit tecnológico que se encuentra muy extendido y distribuido de modo homogéneo en el sistema educativo”.
En cuanto al uso escolar de la tecnología, los datos obtenidos durante el relevamiento muestran que las computadoras son la herramienta TIC más utilizada en la secundaria: 8 de cada 10 estudiantes afirman haberla utilizado con sus docentes. “La implementación del programa “Conectar Igualdad” ha diversificado fuertemente el modelo de integración de las computadoras en las escuelas secundarias estatales, propiciando un mayor uso de dispositivos portátiles en las aulas de clase. De todas formas, no ha reemplazado por completo al tradicional espacio de laboratorio”, señala el estudio.

Marcela Bello

NETBOOKS EN LA SECUNDARIA

Junto a algunos cambios en la dinámica habitual, en el aula y en los recreos, la incorporación de 94 netbooks en la Escuela Secundaria de la UNGS, a mediados de 2015, provocó un proceso de reflexión sobre el programa “Conectar Igualdad”, sobre sus potencialidades y sobre la necesidad de generar espacios de capacitación para los docentes.
“Estar atentos a la navegación que hacen los estudiantes nos permite, como docentes, conocer sus intereses y así reflexionar y pensar sobre ello”, explica Graciela Bellome, vicedirectora de la Escuela. El trabajo a partir de aulas virtuales, videos y medios interactivos les permite a los estudiantes abordar los contenidos desde un lugar que les es propio, con una combinación de lenguajes amigables y conocidos. Y advertimos un nivel de compromiso mucho mayor al que mostraron trabajando en el formato convencional”.

Para Bellome, los estudiantes tienen un saber sobre las nuevas tecnologías que se sustenta en el probar, errar y reintentar, pero necesitan el espacio de reflexión y registro de los diferentes intentos. “Ese es uno de los propósitos del trabajo en la escuela: convertir ese saber en conocimiento válido y transmisible”.