COLECCIÓN FILOSOFÍA DE A PIE.

 

La memoria. Usos y aplicaciones de un concepto indispensable. Rosa Belvedresi. Ediciones UNGS. Colección Filosofía de a pie. Los Polvorines, 2020.

 

Es una alegría y un honor escribir una reseña para darle la bienvenida, dentro de la colección “Filosofía de a pie”, a este libro de Rosa Belvedresi. Resalto la cuestión de la alegría debido a su indudable pertinencia, ya que encuentro que la obra viene a poner en manos de todxs los lectores interesadxs la posibilidad no solo de adquirir conocimiento vinculado a un objeto de indagación académica, la memoria, sino asimismo, y más destacable todavía, de adquirir entrenamiento y herramientas para reflexionar, desde la perspectiva de lo cotidiano y familiar, sobre algunos de los aspectos más fundantes y más fundamentales de la experiencia humana: aquello que nos hace únicos como personas y como colectivo/s, pero que al mismo tiempo nos hace universalmente iguales al resto de los humanos: en tanto seres en la historia, todxs somos portadores de memoria.

Belvedresi expone con maestría un sucinto paneo sobre el complejo, controversial e intrincado mapa conceptual y disciplinar sobre la problemática. La obra se estructura en torno a tópicos clásicos e insoslayables de la filosofía, la sociología y la historiografía, tales como los vínculos entre la memoria individual y la memoria colectiva, las relaciones entre la memoria y la historia, las tensiones entre verdad, veracidad y fidelidad del recuerdo, los problemas de la memoria ante experiencias límite y atroces, las políticas sobre el pasado y las disputas por la memoria, dando cuenta de la magnitud y la seriedad del aparato erudito que hay por detrás de su escritura. Apelando a ejemplos de la vida cotidiana, la autora logra exponer con gran destreza las tensiones que triangula la memoria con respecto a la realidad empírica y los sentidos subjetivos de la experiencia. Pero no se limita a ello, sino que apuesta mucho más allá, o más acá, logrando articular ese complejo ensamblaje hecho de erudición filosófica, gnoseológica y epistemológica con nuestro tormentoso pasado reciente y sus modos dolorosos y muchas veces violentos de estar presente en nuestro presente.

Si bien el planteo de la obra comparte lo que podríamos denominar “sentido común historiográfico” sobre los modos de comprender y conceptualizar los vínculos entre la historia y la memoria, su perspectiva aporta algo único ya que no es la de la Historia, en mayúscula, sino la de la memoria en minúscula, en tanto experiencia “desde el llano” que se constituye en el marco privilegiado (aunque no único) para su elaboración y que pondera la dimensión activa, afectiva, creativa y responsable del trabajo de memoria. Es que, como dice la autora, la memoria no trata únicamente del pasado sino que está también orientada hacia el futuro. De allí su gran relevancia. De la memoria y del libro de Belvedresi. Podría decir, para concluir, que este libro no solo ofrece con claridad información erudita sobre un fenómeno social sino también una valiosa herramienta que nos invita a redoblar la apuesta y a pensarnos, en tanto portadores de memoria, como agentes activos de la historia y, por lo tanto, como forjadores del futuro aún incierto.

Florencia Levín