COLECCIÓN LECTURAS DE ECONOMÍA SOCIAL.
El sujeto necesitado. Una crítica sustantiva al sentido y alcance del concepto económico de necesidad. Inés Arancibia. Ediciones UNGS. Colección Lecturas de Economía Social. Los Polvorines, 2020.
Inés Arancibia cuestiona en este libro la noción del homo economicus, base del pensamiento económico ortodoxo. Analizando el concepto de necesidad, el carácter político de la economía, la centralidad del trabajo, la democratización y la racionalidad reproductiva, construye una lente que permite delinear un perímetro de “lo económico”, identificar estructuras y relaciones sustantivas y diferenciarlas de sus accesorios y contingencias. A partir de la inscripción de la economía política como una rama de la filosofía política, el libro polemiza con las concepciones formalistas y analiza, recuperando la perspectiva de otras ciencias sociales, como la antropología, la producción social de las necesidades y los criterios para su definición. Advierte también que no es este un debate especulativo, sino que el modo de pensar las necesidades incide sobre las políticas públicas y la intervención social a través del relato que construye sobre la pobreza, y por eso refuta el concepto de “necesidades” vigente en el campo semántico de las mediciones de la pobreza, ya que al definir a los sectores vulnerabilizados a partir de sus carencias se los configura como “objetos” de asistencia, conduciendo a pantanosos laberintos de indicadores que no dan cuenta de las dinámicas y heterogeneidades sociales ni de sus posibilidades de transformación.
La opción por la vida como concepto central del proceso económico conduce al diseño de las instituciones como el sistema de la propiedad y las estructuras sociales a partir del derecho a vivir de todos y de cada uno. En este marco, la economía es entendida como estudio de los procesos de satisfacción de las necesidades de los individuos en la sociedad, los dispositivos sociales de distribución y redistribución y las instituciones que configuran un sistema de derechos que garantiza las condiciones para la reproducción de la vida. El concepto de “sujeto necesitado” (Hinkelammert) y la idea de las necesidades como potencialidades (Max Neef) permiten repensar a estas necesidades como “motor” de los procesos de desarrollo y evolución humana y como horizonte de la producción de conocimiento. Por eso Arancibia termina proponiendo una agenda de investigación orientada hacia (y desde) la acción política transformadora, en línea con la idea de Agnes Heller de que la eficacia de una teoría se mide por su capacidad para “seguir la pista” de las necesidades humanas concretas. En el contexto actual, El sujeto… resalta lo absurdo del dilema entre salud y economía, solo pensable si se define “lo económico” lejos de las necesidades. E interpela a una economía incapaz de funcionar cuando la parte de la población que constituye la demanda solvente repliega sus consumos sobre lo estrictamente necesario y la que resuelve sus necesidades al margen de la economía registrada revela un mundo de magnitudes inesperadas.
Daniel Maidana
